viernes, 3 de marzo de 2017

RAVIOLES DE CALABAZA Y RICOTA CON SALVIA FRITA Y NUECES

En una Clase Privada de Pastas para Parejas, preparamos como principal estos ravioles de calabaza y ricota; el aceite de oliva saborizado con más la salvia y nueces fritas redondearon un plato relativamente sencillo y exquisito. La receta, para 6 comensales:


PASTA
- 300 g de harina 0000 (refinada)
-     3 huevos medianos
-    ½ cucharadita de sal

RELLENO
-     ½ calabaza mediana (unos 400 g una vez asada y sin cáscara)
- 250 g de ricota fresca
-   50 g de parmesano rallado
-     1 cucharada de aceite de oliva + adicional para asar la calabaza
-        Sal, pimienta negra y nuez moscada

SALSA
- 75 ml de aceite de oliva
- 24 hojas grndes de salvia fresca
- 50 g de nueces
- 50 g de manteca
-      Sal y pimienta
-      Parmesano rallado para espolvorear la pasta


Embadurnamos la media calabaza con aceite de oliva y la horneamos boca abajo a 200* hasta que se haya tiernizado, unos 45’. Retiramos, dejamos entibiar, pelamos y reservamos.

En un bol mezclamos los ingredientes de la masa, volcamos sobre la mesa de trabajo y amasamos por unos minutos. Envolvemos en papel film y dejamos reposar al menos por ½ hora.

Procesamos conjuntamente la calabaza con la ricota y la yema; agregamos el parmesano, condimentamos, colocamos en bol cubierto y llevamos a frío.

Estiramos la pasta hasta punto 7 de la máquina y dividimos en tiras de tamaño similar. Enharinamos la parte inferior de una tira, la disponemos sobre el molde de ravioles grandes y con una cucharita colocamos el relleno. Cubrimos con la otra tira, presionamos suavemente para quitar el aire y pasamos por encima un palo para sellarlos y separarlos. Volcamos sobre superficie de trabajo y completamos el corte con un cortapastas. Repetimos con las otras tiras, y reservamos sobre superficie enharinada y cubiertos. Volvemos a estirar los restos de masa.

En una cacerola ponemos a calentar abundante agua.

Mientras, en una sartén grande calentamos el aceite a fuego medio y freímos las hojas de salvia hasta que queden crocantes, unos 3’. Retiramos y reservamos sobre papel absorbente

En el mismo aceite doramos las nueces troceadas, retiramos y reservamos sobre papel absorbente.

Antes de poner la pasta a hervir, agregamos al aceite la manteca, salpimentamos y cocinamos a fuego suave hasta que adquiera un color dorado oscuro; a mitad de la cocción de la pasta le incorporamos 2 cucharadas del agua de la pasta.

Cuando el agua rompió el hervor, salamos y volcamos dentro los ravioles, de a uno. Retiramos al dente, unos 3’, escurrimos y echamos en la sartén con la salsa, las nueces y la salvia.

Mezclamos bien y servimos de inmediato en platos preferentemente precalentados, espolvoreando con un poco de parmesano rallado.  Una exquisitez!