lunes, 30 de noviembre de 2015

COOKING CLASS + TANGO CLASS + WINE TESTING AT EL ARTE DE AMASAR





"We all had a great time - what could be better than dancing, delicious food and excellent wine in good company?  Thanks for the experience and we'll be sure to write a review on TripAdvisor". Laura Lee

sábado, 28 de noviembre de 2015

PENNE RIGATI CON CALABAZA ASADA Y PEREJIL: SENCILLO, SABROSO Y SALUDABLE

Un plato de pastas muy rápido de preparar, muy sabroso y muy saludable; ideal para compartirlo en familia un día cualquiera... Sobre una receta de Epicurious , Para 4 porciones:

- 500 g de penne rigati o similar
- 500 g de calabaza pelada y cortada en cubos pequeños (3/4 cms de diámetro aprox)
-   1/2 tacita de aceite de oliva
-     1 cebolla grande finamente picada
-     4 cucharadas de parmesano recién rallado
-     2 cucharadas colmadas de perejil picado
-        sal y (abundante) pimienta negra recién molida

Precalentamos el horno a 220*

En un bol mezclamos los cubitos de calabaza con 2 cucharadas de aceite y 1/2 de sal,  los distribuimos luego en una asadera sin que se superpongan y horneamos unos 30' hasta que estén tiernos y comiencen a dorarse.

En una olla grande ponemos a hervir abundante agua. Cuando rompió a hervir salamos y echamos dentro la pasta procurando esté al dente tiempo de la calabaza. Retiramos y escurrimos reservando una tacita del líquido de la cocción.

Procesamos la mitad de los cubos de calabaza junto con el agua de la cocción hasta lograr una consistencia de crema espesa.

Calentamos 1 cucharada de aceite en una sartén grande y salteamos la cebolla con una pizca de sal hasta transparentar; añadimos el puré y los cubos de calabaza y salteamos por otro minuto.

Incorporamos la pasta, mezclamos y retiramos del fuego. Agregamos el queso rallado, el perejil y el aceite remanente; pimentamos y servimos de inmediato.


                    

jueves, 26 de noviembre de 2015

TARTA INTEGRAL DE CALABAZA, CEBOLLA COLORADA, YOGUR, SÉSAMO Y HIERBAS AROMÁTICAS

Shreya y Vicram, una pareja de hermanos americanos de origen Indio me pidieron una Clase + Cena Degustación de comida vegetariana. Preparamos pastas caseras y esta tarta que y salió riquísima, con excelentes contrastes de sabores y texturas. La receta, para una tartera de 25 a 28 cms de diámetro:

MASA
-100 g de harina de trigo integral
-100 g de harina de trigo común (también podemos hacerla 100% integral pero es un poco más difícil si manipulación)
-  70 ml de agua
-  70 ml de aceite
- 1/2 cucharadita de sal

RELLENO
- 1 calabaza chica, 800 g aprox, pelada y cortada en cubos
- 1 cebolla colorada grande picada
- 1 pote de yogur natural o 200g de queso crema
- 3 huevos grandes
- 1 cucharada de hojas de tomillo picadas
- 1 cucharadita de hojas de romero fresco picadas
- 1 cucharadita de hojas de menta fresca picada
- 1 cucharada de hojas de orégano fresco picadas
- 1 tacita de vino blanco
- 2 ó 3 cucharadas de semillas de sésamo
- sal y pimienta negra recién molida y ají molido o peperoncino si gustan el picante

En un bol mezclamos los ingredientes de la masa, volcamos sobre la superficie de trabajo y amasamos hasta obtener una masa suave y sedosa. Envolvemos en papel film y dejamos reposar.

En una sartén grande salteamos la cebolla picada con el aceite de oliva y una pizca de sal; luego de 2´añadimos los cubos de calabaza y continuamos la cocción hasta que estén tiernos, unos 10´, mezclando cada tanto. A mitad de la cocción incorporamos el vino blanco y las hierbas.

Retiramos el fuego; batimos los huevos con el yogur o queso crema y los incorporamos a la mezcla. Salpimentamos y revolvemos.

Con la ayuda de un palote estiramos la masa en forma redondeada y de un diámetro unos cms mayor que la tartera a la cual forramos volcando los excedentes de masa hacia afuera.

Echamos dentro el relleno y floreamos con las semillas de sésamo. Con el canto de un cuchillo cortamos los excedentes de masa.

Horneamos a 180* (3/4 temperatura horno gas) por unos 45´, hasta que la masa se vea cocida y el relleno firme.

Retiramos y esperamos por lo menos 15´antes de desmoldar y servir.



lunes, 23 de noviembre de 2015

PIZZA A LA PIEDRA DE BERENJENA AHUMADA, OLIVAS NEGRAS, TOMATES CHERRYS, MUZZARELLA Y SARDO

Continuando con la experimentación con berenjenas ahumadas -quemadas en realidad sobre la hornalla- propuse esta pizza en una comida de amigos y resultó con un sabor excelente, al punto que una comensal que no comía berenjena "de ninguna manera"me honró pidiéndome otra porción...Lo que hace original a esta pizza es que empleamos la berenjena quemada sobre la hornalla incluida la cáscara, lo cual le da justamente el sabor ahumado, algo rústico y muy aromático. La receta:

MASA, para 4 pizzas medianas
- 500 g de harina 0000 (refinada)
-   10 g de levadura fresca, o menos
- 300 cc de agua
-   3 cucharadas de aceite de oliva
-    1 cucharadita colmada de sal
- 1/4 cucharadita de pimienta blanca

COBERTURA, por pizza
-     berenjena grande o 2 chicas
- 150 g de muzzarella picada o rallada
-     1 puñado de tomates cherry cortados al medio longitudinalmene
-     1 diente de ajo
-        aceite de oliva
-        salsa de tomates frescos (ver abajo)
-        sal, pimienta negra recién molido y peperoncino o ají molido

Hacemos una corona con la harina y la sal por fuera y en su centro volcamos el agua y disolvemos la levadura; incorporamos con cuidado la harina y cuando comienza a formarse la masa agregamos el aceite.

Amasamos por unos minutos (la masa debe quedar bastante húmeda), cubrimos y esperamos unas 2hs hasta a que duplique su volumen. El tiempo de levado depende de la cantidad de levadura empleada y la temperatura ambiente; es conveniente reducir la cantidad de levadura y dejar levar más lentamente la masa, incluso en la heladera; los resultados bien valen el tiempo de espera.

La salsa de tomates propuesta es simplemente tomate maduro procesado y condimentado discretamente con sal pimienta, orégano, ají molido y un poco de aceite de oliva. Si no es época de tomates o estamos muy apurados podemos también emplear tomate triturado de buena calidad.

Pasado el tiempo de levado volcamos la masa sobre la superficie de trabajo, desgasificamos, dividimos en 4 partes, bollamos y dejamos reposar en superficie enharinada y cubiertos al menos por 30´ y hasta unas 2 hs (al emplear poca levadura la masa se mantiene relajada y sin levar por bastante tiempo).

Encendemos el horno con mucha anticipación, las piedras refractarias deben estar tan calientes como sea posible.

Con la mano o ayuda de un palote estiramos los bollos delgados dándoles forma rectangular (es preferible a la forma redonda si queremos servirla para comer con la mano).

Pincelamos con la salsa de tomates y con una pala vamos depositando las pizzas de inmediato sobre la piedra del horno muy caliente y a máxima temperatura. Retiramos apenas comienzan a tomar color; la idea es marcarlas apenas de modo de facilitarnos el trabajo al recibir a los comensales.

Quemamos la berenjena sobre la hornalla a fuego fuerte hasta que se haya tiernizado. Dejamos entibiar y procesamos conjuntamente con el diente de ajo. Salpimentamos.

A la hora del servicio distribuimos sobre la/s pizza/s  la berenjena procesada y por encima la muzzarella, las olivas negras descarozadas cortadas por la mitad y los tomates cherry boca arriba. Floreamos por último con el sardo rallado.

Horneamos sobre la piedra bien caliente y a temperatura máxima hasta que el queso se haya gratinado y la masa se vea crujiente.

Al retirar rociamos con aceite de oliva, pimentamos y servimos de inmediato. 




martes, 17 de noviembre de 2015

RAVIOLES DE BERENJENA ASADA Y SARDO, CON MANTECA NEGRA, ACETO Y NUECES TOSTADAS

En una "Private Cooking Lesson for Two" con una pareja de Americanos que eligieron como principal "pastas especiales"-en lugar de los pedidos más tradicionales de carnes o empanadas-, fuimos componiendo estos ravioles que salieron espléndidos. Y digo los fuimos componiendo porque la idea que tuve al redactar la receta fue cambiando a lo largo de la clase (una experiencia que tuve habitualmente como alumno de la querida Beatriz Chomlanez: nos daba "la receta" la cual sólo por casualidad se correspondía con lo que ella finalmente preparaba...). He aquí la "receta final" la cual seguramente sabrán ajustar los colegas cocineros a su propia intuición y creatividad:

MASA
- 200 g de harina 0000
-     2 huevos
-    ½ cucharadita de sal

RELLENO
-     2 berenjenas chicas
- 100 g de queso crema
-   50 g de sardo semi estacionado rallado
-     2 dientes de ajo
-     1 huevo
-      Sal,  pimienta negra recién molida y peperoncino


SALSA
- 100 g de manteca
- 2 cucharadas de aceto balsámico
- 100 g de nueces tostadas

-    ciboulette picada

Preparamos la pasta del modo habitual (Masa para pasta al huevo, técnicas básicas).

Quemamos las berenjenas sobre el fuego hasta que se hayan tiernizado.

Dejamos entibiar, troceamos sin pelar, escurrimos un poco y procesamos conjuntamente con el ajo y el huevo. Añadimos el parmesano y el pan rallado, condimentamos y mezclamos.

Estiramos la masa hasta el punto 8 de la máquina y dividimos en tiras algo mayores que el tamaño del molde de pastas que emplearemos.

Colocamos una tira sobre el molde y con una cucharita o manga vamos distribuyendo el relleno. Pincelamos ligeramente los bordes, cubrimos con la otra tapa y pasamos varias veces un palo por encima de modo de cortar y sellar.

Volcamos sobre la mesa enharinada y cubrimos con un repasador. Repetimos con las otras tiras y volvemos a estirar los restos de masa que fueron quedando.

En una sartén sin engrasar tostamos las nueces y picamos groseramente.

Ponemos a hervir abundante agua.

Cuando el agua rompió a hervir la salamos y en una sartén grande a  fuego suave calentamos la manteca hasta que adquiera un color amarronado.

Volcamos la pasta dentro del agua hirviendo, retiramos al dente, no más de 2´, y volcamos dentro de la sartén con la manteca ya oscurecida junto con el aceto balsámico y la mitad de las nueces.

Emplatamos en platos precalentados floreando con el resto de las nueces y la ciboulette picada.

Alguien que participó de invitada de último momento a la cena dijo que fueron de los mejores ravioles que haya comido, espero se anime a ratificarlo fehacientemente...



martes, 10 de noviembre de 2015

PAN SIN GLUTEN III, EN UNA CLASE DE COCINA PARA CELÍACOS

Ayelel y Pablo, una preciosa pareja veinteañera, me solicitaron una "Clase Privada de Cocina + Cena Degustación" con la salvedad que Ayelen era celíaca por lo cual no deberíamos emplear nada con gluten. Así es que les propuse preparáramos un pan sin gluten, mientras ellos eligieron como principal un Risotto de Quinoa, Girgolas y Champiñones y como postre un semifreddo de dulce de leche y ron. He aquí la receta del pan la cual creo podrá ser de utilidad para aquellos que no pueden o prefieren evitar el gluten; el pan salió muy bueno y es bastante fácil y rápido de preparar. Para un molde de 30x12 cms:

- 150 g de harina de arroz
- 150 g de fécula de mandioca
- 150 g de fécula de maíz
- 200 ml de agua
-     3 huevos ligeramente batidos
-     3 cucharadas de aceite
-   25 g de levadura fresca
    - 1 cucharada de miel o azúcar mascabo
-     1 cucharadita colmada de sal

Encendemos el horno.

En un bol grande mezclamos las 3 harinas y la sal y hacemos un hueco en su centro.

Disolvemos la levadura en el agua con la miel, esperamos unos minutos a que comience a burbujear y volcamos en el hueco de la harina; revolvemos un poco y añadimos los huevos batidos con el aceite.

Continuamos mezclando con una cuchara de madera hasta integrar muy bien. La masa resultará imposible de amasar, lo cual tampoco es necesario por cuanto no hay gluten para desarrollar.

Engrasamos el molde, lo espolvoreamos con harina de arroz y volcamos dentro la mezcla.

Cubrimos y luego de unos 15´ horneamos en horno suave por unos 40´; retiramos, desmoldamos y dejamos orear sobre rejilla.

Resulta un pan bastante aireado y sabroso y al cual desde ya pueden adicionársele semillas tales como sésamo, lino o girasol u otros sabores tales como parmesano, cebolla...

jueves, 5 de noviembre de 2015

GEFILTE FISH PORTEÑO CONTEMPORÁNEO

A muchos sorprenderá tamaño nombre para un plato tan antiguo y tradicional de la cocina judía centro-europea y es que hay tantas recetas para este plato tantas veces adaptado a los (escasos) recursos conque disponían las mamás-bobes cocineras en cada lugar del planeta donde el destino las había llevado que me pareció procedente hacer mi propia versión contemporánea del mismo. Y es que recibía ayer a Ursula una argentina ashkenazi que hace muchos años vive en España y de visita por Buenos Aires me pidió una clase especial de comida judía en la que preparamos justamente gefilte fish con más varenikes y knishes (una clase divertida y a-go-ta-do-ra!). Esta versión de gefiltefish, bastante fácil de preparar, muy sabrosa, de elegante presentación y con ciertos toques de originalidad, esta basada en consultas a unas cuantas expertas amigas (gracias!) con más un poco de la net. La receta, para una budinera de 30x10:

- 1 kg de mezcla de filetes pescados de carne firme (empleé lisa, mero y chernia)
- ½ kg de cebollas picada fino rehogada, sin quemar
- 3 huevos ligeramente batidos
- 3 cucharadas de matzemeil o pan rallado o panko
- 1 cucharada de azúcar (+ ó - según gusto)
- 1 cucharada de aceite
- 2 zanahorias tiernas medianas procesadas o ralladas
-   sal a gusto y abundante pimienta blanca
-    perejil picado para decorar

Troceamos los filetes y los procesamos bien. 

Colocamos en un bol, agregamos el resto de los ingredientes y volvemos a procesar por unos instantes. Condimentamos con sal azúcar y pimienta blanca.

Ponemos la preparación en la budinera previamente forrada con papel film, emparejamos presionando suavemente con una espátula y cubrimos con papel de aluminio.

Horneamos a 180* por 30´ luego de lo cual quitamos el papel film y cocinamos por otros 10´a 15´para que se dore parte superior.

 Retiramos, desmoldamos y decoramos con perejil picado o rodajas cocidas de zanahorias y/o remolacha.  

Acompañamos, obviamente, con jrein (rábano picante).

Espero prueben prepararlo y les salga tan rico como a nosotros en la clase. Sugerencias mejoradoras siempre bienvenidas!

martes, 3 de noviembre de 2015

RISOTTO DE QUINOA CON CHAMPIÑONES, GIRGOLAS, TOMILLO FRESCO Y TOMATES CHERRY

Este risotto lo  preparamos ayer en una "Cooking Lesson" con Isabella y su hija Julia, dos simpatiquísimas turistas canadienses amantes de cocina saludable. La receta, para 4 personas:

- 300 g de granos de quinoa
- 200 g de champiñones frescos fileteados
-   30 g de girgolas secas o similar
-   12 tomates cherry
-     1 cebolla mediana picada
-     1 diente de ajo picado
-  1/2 vaso de vino blanco
-     1 litro aprox de caldo de verduras que incluirá el líquido de la hidratación de los hongos
-     2 cucharadas de aceite de oliva
-     1 cucharada de manteca
-     1 cucharada colmada de hojas de tomillo fresco
-     2 cucharadas de parmesano rallado
-        sal y pimienta negra recién molida
-        ciboulette picada para decorar

Ponemos a hidratar las gírgolas en agua tibia por al menos una hora. Escurrimos bien, picamos y reservamos el líquido para el caldo

Enjuagamos los granos de quinoa 2 veces con agua fría; escurrimos y reservamos.

En una sartén grande con el aceite y una pizca de sal salteamos la cebolla y el ajo picados; cuando la cebolla comienza a dorarse incorporamos ambos hongos y el tomillo y luego de 5´ las semillas de quinoa.

Mezclamos y pasados 2´ desglasamos con el vino blanco. Incorporamos los tomates cherry y comenzamos a incorporar el caldo caliente de a cucharones, lentamente y siempre mezclando como en el caso de un risotto tradicional.

 Cuando la quinoa esté casi a punto, unos 20', añadimos la manteca y el parmesano. Revisamos sal, pimentamos, mezclamos, apagamos el fuego, tapamos y esperamos unos minutos antes de servir.

Servimos floreando con ciboulette picada.