martes, 5 de agosto de 2014

TARTA DE TOMATES ROSTIZADOS, ALBAHACA Y TRES QUESOS

En una clase particular de cocina con Matías, un Futuro-Gran-Chef, preparamos esta tarta bastante original y super sabrosa, nos encantó a ambos. La receta, para una tartera de 25 cms aprox:

MASA
- 200 g de harina 0000
-   65 cc de aceite
-   65 cc de agua
-  1/2 cucharadita de sal
-     1 pizca de pimienta blanca

RELLENO
-     4 tomates mediano-grandes no muy maduros
-     1 taza de hojas de albahaca fresca picada
-     3 huevos grandes
- 200 g de ricota
- 100 g de muzarella en trozos pequeños
- 100 g de sardo o similar rallado
-     1 cucharada de pan rallado
-  1/2 cucharadita de sal
-        pimienta negra a gusto

En un bol mezclamos los ingredientes de la masa hasta integrar, volcamos sobre una superficie apenas enharinada y amasamos hasta obtener una masa suave y sedosa. Envolvemos en papel film y dejamos reposar unos 30´ a temperatura ambiente.

Encendemos el horno. Cortamos los tomates en rodajas delgadas y colocamos la mitad de ellos en una fuente de horno  con unas gotas de aceite. Una vez el horno tomó temperatura, cocinamos a temperatura máxima  por 15' de modo que pierdan humedad y concentren su sabor. Retiramos y dejamos entibiar.

Batimos los huevos, incorporamos la ricota y la albahaca y continuamos batiendo por un minuto. Agregamos la muzzarella y la mitad del sardo, mezclamos, salpimentamos ligeramente y reservamos.

Sobre superficie enharinada con un palote estiramos la masa bien delgada, forramos la tartera previamente pincelada con aceite o rocío vegetal (no hace falta si es teflonada) ; floreamos su base con el pan rallado y la mitad del sardo reservado, cubrimos con los tomates rostizados, por encima la preparación y por sobre ésta las rodajas de tomates crudos. Volcamos la masa sobre el relleno o la cortamos con el canto de un cuchillo si la preferimos "más prolija"

Llevamos a horno moderado por unos 50', hasta que haya tomado buen color. Y, como en muchas otras oportunidades, hacemos un esfuerzo, resistimos la tentación y comemos tibia. Es exquisita!