viernes, 9 de julio de 2010

POLENTA GRILLADA CON CHAMPIGNONES, PORTOBELOS, HONGOS DE PINO Y ACETO CARAMELIZADO

La polenta ha a sido poco valorada culinariamente en la Argentina, fue por muchos años "demasiado barata", comida de pobres... Sin embargo hay deliciosos y refinados platos que pueden hacerse con este noble alimento, y este es uno de ellos, basado en una receta de Francis Mallman:

POLENTA (4 porciones)
- 250 g harina de maíz
- 250 g leche
- 250 g agua o caldo de verduras
-   50 g queso azul en cubeteado
-   50 g parmesano rallado
-     2 cucharadas perejil picado
-        sal y pimienta negra
-        aceite c/n

HONGOS
-  25 g hongos de pino
-  50 g champignones
-  50 g portobelos
-  20 g manteca + 2 cucharadas aceite de oliva
-100 g de vino tinto
-       sal y pimienta negra

ACETO ALMIBARADO
-  50 g aceto balsámico
-  50 g azúcar
-100 g agua

Ponemos a calentar la leche con el agua en una cacerola y una vez rompió a hervir bajamos el fuego e incorporamos la polenta en forma de lluvia y mezclando constantemente; agregamos el perejil picado, los quesos y salpimentamos y retiramos del fuego.

Pincelamos una asadera con aceite, volcamos la polenta y con una espátula húmeda la estiramos y alisamos hasta un grosor de 1.5 - 2 cms; llevamos a la heladera.

Lavamos e hidratamos los hongos de pino en el vino tinto por un par de horas; llevamos luego a cocción por unos 15 minutos adicionando un poco de agua, hasta que se hayan tiernizado y la salsa reducido.

Cortamos los champignones y portobelos en 4 o 6 según tamaño, los salteamos por unos minutos en la manteca y el aceite y mezclamos luego con los hongos de pino; salpimentamos.

Calentamos en una cacerolita el aceto con el azúcar y el agua y una vez rompió a hervir bajamos el fuego y cocinamos unos 5 minutos hasta lograr consistencia de caramelo, cuidando no dejar reducir demasiado.

Retiramos la polenta de la heladera, cortamos en cuadrados de unos 8 cms de diámetro a los que le hacemos un corte transversal obteniendo dos triángulos por cada cuadrado.

Calentamos una plancha o sartén pesado, y doramos en aceite los triángulos de polenta de ambos lados.

Disponemos 3 o 4 triángulos en cada plato, echamos por encima los hongos y acompañamos con una ensaladita de espinacas o berros ligeramente aderezada. Rociamos finalmente con el aceto almibarado (en el plato de la foto, y por una cuestión estética, debió haberse rociado algunas gotas de aceto sobre el plato mismo, pero ya lo comimos...).

Un plato delicadísmo.