Este tipo de panes me encantan y los preparo con frecuencia probando modificar algunos de sus ingredientes; en esta oportunidad empleé 5 variedades de semillas y 4 de harinas con un resultado que me deja más que satisfecho: además de muy nutritivos salieron riquisimísimos como dice mi amiga Susana M.... Para 5 panes de molde de 30 x 10 cms:
- 1 litro de agua
- 20 g de levadura fresca
- 400 g de masa madre
- 400 g de harina integral
- 150 g de harina de centeno
- 100 g de harina de maíz (polenta)
- 100 g de avena arrollada
- 100g de semillas de lino
- 100 g de semillas de girasol
- 100 g de semillas de sésamo
- 100 g de semillas de chia
- 50 g de semillas de amapola
- 2 cucharadas de azúcar morena
- 40 g de sal
Retiramos la masa madre de la heladera, la treceamos y dejamos atemperar en un bol con el agua. Luego de un rato agregamos la harina, mezclamos y esperamos unas 2 hs.
Hidratamos las semillas de chía y lino en 1, 5 veces la cantidad de agua.
Pasadas las 2hs incorporamos levadura desgranada y el azúcar morena; mezclamos y luego de 30´ añadimos el resto de los ingredientes (salvo las semillas de amapola que emplearemos para decorar); volcamos sobre superficie enharinada y amasamos por 15´ a 20´ hasta obtener una masa suave y sedosa, adicionando siempre la menor cantidad de harina posible. Si empleáramos una amasadora es conveniente completar el amasado a mano para incorporarle más aire y comprobar la calidad de la masa.
Hacemos un bollo y dejamos levar en bol cubierto y previamente pincelado con aceite hasta que duplique su volúmen, unas 2 hs. Desgasificamos y repetimos (el tiempo de levado será algo menor).
Volcamos la masa sobre la superficie de trabajo, desgasificamos, hacemos un chorizo y dividimos en 5 partes iguales; las bollamos, cubrimos y dejamos reposar 15´. Encendemos el horno.
Para dar forma a los panes, con cada bollo hacemos lo siguiente:
- Presionamos con la mano conformando un rectángulo,
- volcamos uno de los lados más largos del rectángulo hacia su centro,
- sellamos con el canto de la mano
- repetimos con el otro lado y volvemos a sellar
- estiramos un poco con las palmas de la mano
- volcamos un lado de la masa sobre el otro y sellamos con los dedos todo el perímetro.
- hacemos con la masa un vaivén suave sobre la superficie de trabajo estirándola hasta el diámetro del molde.
- colocamos cada pieza, con las costuras para abajo dentro del molde previamente pincelado con aceite y presionamos para cubrir toda su superficie.
Pincelamos con aceite (o huevo si preferimos, o chuño), decoramos con las semillas de amapola, efectuamos algunos cortes con un cutter o cuchillo filosos, cubrimos y dejamos levar unos 30´ en ambiente cálido y sin corriente de aire (no debe levar tanto en esta oportunidad).
Horneamos en horno caliente (200*) y prehumidificado por unos 30´; el pan debe lucir bien tostado y su base sonar hueca. Retiramos y dejamos orear sobre rejilla.
Un pan nutritivo y exquisito, bien vale la pena el trabajo y el tiempo que le dedicamos!
- 1 litro de agua
- 20 g de levadura fresca
- 400 g de masa madre
- 400 g de harina integral
- 150 g de harina de centeno
- 100 g de harina de maíz (polenta)
- 100 g de avena arrollada
- 100g de semillas de lino
- 100 g de semillas de girasol
- 100 g de semillas de sésamo
- 100 g de semillas de chia
- 50 g de semillas de amapola
- 2 cucharadas de azúcar morena
- 40 g de sal
Retiramos la masa madre de la heladera, la treceamos y dejamos atemperar en un bol con el agua. Luego de un rato agregamos la harina, mezclamos y esperamos unas 2 hs.
Hidratamos las semillas de chía y lino en 1, 5 veces la cantidad de agua.
Pasadas las 2hs incorporamos levadura desgranada y el azúcar morena; mezclamos y luego de 30´ añadimos el resto de los ingredientes (salvo las semillas de amapola que emplearemos para decorar); volcamos sobre superficie enharinada y amasamos por 15´ a 20´ hasta obtener una masa suave y sedosa, adicionando siempre la menor cantidad de harina posible. Si empleáramos una amasadora es conveniente completar el amasado a mano para incorporarle más aire y comprobar la calidad de la masa.
Hacemos un bollo y dejamos levar en bol cubierto y previamente pincelado con aceite hasta que duplique su volúmen, unas 2 hs. Desgasificamos y repetimos (el tiempo de levado será algo menor).
Volcamos la masa sobre la superficie de trabajo, desgasificamos, hacemos un chorizo y dividimos en 5 partes iguales; las bollamos, cubrimos y dejamos reposar 15´. Encendemos el horno.
Para dar forma a los panes, con cada bollo hacemos lo siguiente:
- Presionamos con la mano conformando un rectángulo,
- volcamos uno de los lados más largos del rectángulo hacia su centro,
- sellamos con el canto de la mano
- repetimos con el otro lado y volvemos a sellar
- estiramos un poco con las palmas de la mano
- volcamos un lado de la masa sobre el otro y sellamos con los dedos todo el perímetro.
- hacemos con la masa un vaivén suave sobre la superficie de trabajo estirándola hasta el diámetro del molde.
- colocamos cada pieza, con las costuras para abajo dentro del molde previamente pincelado con aceite y presionamos para cubrir toda su superficie.
Pincelamos con aceite (o huevo si preferimos, o chuño), decoramos con las semillas de amapola, efectuamos algunos cortes con un cutter o cuchillo filosos, cubrimos y dejamos levar unos 30´ en ambiente cálido y sin corriente de aire (no debe levar tanto en esta oportunidad).
Horneamos en horno caliente (200*) y prehumidificado por unos 30´; el pan debe lucir bien tostado y su base sonar hueca. Retiramos y dejamos orear sobre rejilla.
Un pan nutritivo y exquisito, bien vale la pena el trabajo y el tiempo que le dedicamos!