En una Clase de Pizzas de Hombres preparamos varias experimentales, jugando un poco, y entre ellas esta que se le ocurrió a Gabriel (thanks G. for your nice comment at TripAdvisor by the way!) -muy aficionado a los picantes al menos para los estándares porteños- al encontrar entre mis variadas especias un molinillo con curry que me habían traído de la India. La pizza resultó sorprendentemente sabrosa y, claro un poco picante.. La receta por si alguno se sintiera tentando:
MASA, para 4 pizzas medianas
- 500 g de harina 0000 (refinada)
- 10 g de levadura fresca, o menos
- 300 cc de agua
- 50 cc de aceite de oliva
- 1 cucharadita colmada de sal
- 1/4 cucharadita de pimienta blanca
COBERTURA, por pizza
- 1 puñado generoso de hojas de albahaca fresca
- 150 g de muzzarella picada o rallada
MASA, para 4 pizzas medianas
- 500 g de harina 0000 (refinada)
- 10 g de levadura fresca, o menos
- 300 cc de agua
- 50 cc de aceite de oliva
- 1 cucharadita colmada de sal
- 1/4 cucharadita de pimienta blanca
COBERTURA, por pizza
- 1 puñado generoso de hojas de albahaca fresca
- 150 g de muzzarella picada o rallada
- 2 tomates perita maduros en rodajas delgadas
- 1 cucharadita de curry picante
- 1 cucharadita de curry picante
- granos de sal gruesa y pimienta negra recién molida
- aceite para regar la pizza
- salsa de tomates frescos (ver abajo)
Hacemos una corona con la harina y la sal por fuera y en su centro volcamos el agua y disolvemos la levadura; incorporamos con cuidado la harina y cuando comienza a formarse la masa agregamos el aceite.
Amasamos por unos minutos (la masa debe quedar bastante húmeda), cubrimos y esperamos unas 2hs hasta a que duplique su volumen. El tiempo de levado depende de la cantidad de levadura empleada y la temperatura ambiente; es conveniente reducir la cantidad de levadura y dejar levar más lentamente la masa, incluso en la heladera; los resultados bien valen el tiempo de espera.
La salsa de tomates propuesta es simplemente tomate maduro procesado y condimentado discretamente con sal pimienta, orégano, ají molido y un poco de aceite de oliva. Si no es época de tomates o estamos muy apurados podemos también emplear tomate triturado de buena calidad.
Pasado el tiempo de levado volcamos la masa sobre la superficie de trabajo, desgasificamos, dividimos en 4 partes, bollamos y dejamos reposar en superficie enharinada y cubiertos al menos por 30´ y hasta unas 2 hs (al emplear poca levadura la masa se mantiene relajada y sin levar por bastante tiempo).
- salsa de tomates frescos (ver abajo)
Hacemos una corona con la harina y la sal por fuera y en su centro volcamos el agua y disolvemos la levadura; incorporamos con cuidado la harina y cuando comienza a formarse la masa agregamos el aceite.
Amasamos por unos minutos (la masa debe quedar bastante húmeda), cubrimos y esperamos unas 2hs hasta a que duplique su volumen. El tiempo de levado depende de la cantidad de levadura empleada y la temperatura ambiente; es conveniente reducir la cantidad de levadura y dejar levar más lentamente la masa, incluso en la heladera; los resultados bien valen el tiempo de espera.
La salsa de tomates propuesta es simplemente tomate maduro procesado y condimentado discretamente con sal pimienta, orégano, ají molido y un poco de aceite de oliva. Si no es época de tomates o estamos muy apurados podemos también emplear tomate triturado de buena calidad.
Pasado el tiempo de levado volcamos la masa sobre la superficie de trabajo, desgasificamos, dividimos en 4 partes, bollamos y dejamos reposar en superficie enharinada y cubiertos al menos por 30´ y hasta unas 2 hs (al emplear poca levadura la masa se mantiene relajada y sin levar por bastante tiempo).
Encendemos el horno con mucha anticipación, las piedras refractarias deben estar tan calientes como sea posible.
Con la mano o ayuda de un palote estiramos los bollos delgados dándoles forma rectangular (es preferible a la forma redonda si queremos servirla para comer con la mano).
Pincelamos con la salsa de tomates y con una pala vamos depositando las pizzas de inmediato sobre la piedra del horno muy caliente y a máxima temperatura. Retiramos apenas comienzan a tomar color; la idea es marcarlas apenas de modo de facilitarnos el trabajo al recibir a los comensales.
A la hora del servicio distribuimos sobre la/s pizza/s las hojas de albahaca, por encima los tomates y finalmente la muzzarella. Floreamos con el curry picante y algunos granos de sal gruesa.
Horneamos sobre la piedra bien caliente y a temperatura máxima hasta que el queso se haya gratinado y la masa se vea crujiente.
Al retirar rociamos con aceite de oliva y un toque de pimienta negra.
Con la mano o ayuda de un palote estiramos los bollos delgados dándoles forma rectangular (es preferible a la forma redonda si queremos servirla para comer con la mano).
Pincelamos con la salsa de tomates y con una pala vamos depositando las pizzas de inmediato sobre la piedra del horno muy caliente y a máxima temperatura. Retiramos apenas comienzan a tomar color; la idea es marcarlas apenas de modo de facilitarnos el trabajo al recibir a los comensales.
A la hora del servicio distribuimos sobre la/s pizza/s las hojas de albahaca, por encima los tomates y finalmente la muzzarella. Floreamos con el curry picante y algunos granos de sal gruesa.
Horneamos sobre la piedra bien caliente y a temperatura máxima hasta que el queso se haya gratinado y la masa se vea crujiente.
Al retirar rociamos con aceite de oliva y un toque de pimienta negra.
Nos pareció muy buena esta pizza a los hombres de esa clase...