sábado, 6 de mayo de 2017

PIZZA A LA PIEDRA CON MUZZARELLA Y SALAME, SIMPLEMENTE

En una clase de una serie que estamos haciendo con una lindísima pareja argentina que pronto se va a vivir a Fortaleza, Brasil, y tienen la determinación de hacer "la mejor pizzería-empanadería de la ciudad", preparamos a pedido de ellos esta pizza a la piedra, super sencilla y aún así super rica, basta que empleemos una muy buena muzzarella y un mejor salame. La receta, básica, sobre la cual podrán adicionar los que les plazca, y siguiendo para la masa una técnica napolitana que me encanta (requiere bastante paciencia y casi nada de trabajo):

MASA, para 3 pizzas grandes
- 500 g de harina 0000 (refinada)
- 350 g de agua
-     3a 4 g de levadura fresca (muy poca)
-   12 g de sal (una cucharadita colmada)

COBERTURA, por pizza
- 150 g de salame en rodajas
- 150 g de muzzarella rallada o en trozos pequeños
-        salsa de tomate (ver abajo)

La masa la prepararemoas con 24 a 36 horas de antelación (es cuestión de paciencia, bien lo vale...):
1. En un bol disolvemos la sal en el agua y luego incorporamos la levadura y revolvemos.

2. Esperamos unos minutos, echamos dentro la harina y primero con una cuchara de madera y luego con un cornete la integramos, un trabajo de no más de un minuto. Cubrimos y dejamos reposar 20'.

3. Volcamos la masa sobre una superficie ligeramente enharinada y con movimientos rápidos la
estiramos y volcamos sobre si misma una cuantas veces, un trabajo de otro minuto... Bollamos, colocamos en bol pincelado con aceite, cubrimos con papel film o nylon y dejamos levar por 2 horas.

4. Volcamos la masa sobre una superficie enharinada y la cortamos en 3 (o hasta 5) partes de peso similar. Las bollamos y colocamos en un plato tupper amplio dejando algún espacio entre cada una; las espolvoreamos con un poco de harina, tapamos y llevamos a frío por 24 a 36 horas.

5. Retiramos de la heladera entre 1 y 1/2 y 2 horas antes del horneado.

6. Ya atemperados los bollos, enharinamos bien la superficie de trabajo y con la mano vamos estirando la masa de forma redondeada y dejando los bordes un poco más grueso (veremos muchos ejemplos de estirado en internet); la masa presentará muy poca resistencia. La pizza deberá quedar delgada pero no tanto, tendrá que ser capaz de soportar los toppings que le pongamos.

7. La salsa propuesta, al estilo napolitano, es super sencilla: elegimos una lata de tomates perita de la mejor calidad y lo procesamos apenas con un poquito de sal. Nada más.

8. Encendemos el horno con bastante antelación al momento del horneado, la piedra debe estar tan caliente como sea posible.

9. Pintamos la pizza con la salsa de tomates, dejando los bordes libres, y horneamos sobre la piedra hasta que la base comience a tomar color, de 3 a 5 o más minutos, dependiendo de la temperatura de la piedra y del horno. Este primer horneado lo podemos hacer con antelación para estar más cómodos al momento de recibir los invitados.

10. Ya con los comensales en la mesa y el horno bien caliente, cubrimos la pizza con la muzzarella, distribuimos por encima el salame (o por debajo según prefieran, nosotros hicimos 50% y 50%) y horneamos hasta que el queso comience a gratinar, unos 5'.

Una pizza super sencilla que gustará mucho. Una pena por los vegetarianos...