sábado, 20 de junio de 2020

RAVIOLES DE CALABAZA Y ALMENDRAS, CON SALSA DE NARANJA, JENGIBRE Y SALVIA

Recordando un interesante plato de pastas que preparamos hace 7 años en una Clase Intensiva de Pastas (el tiempo pasa...). La receta, con algunos retoques, para 4 personas:

PASTA
- 200g de harina 0000 (refinada)
-     2 huevos
-        semolina para espolvorear

RELLENO
- 250 g de puré de calabazas, preferentemente cocida en el horno, o bien escurrida si la hervimos.
-   50 g de almendras tostadas picadas grueso
-     1 cebolla de verdeo picada, parte blanca y verde tierna
-     1 cucharada de pan rallado
-     1 huevo ligeramente batido
-     1 cucharadas de hojas salvia fresca picadas
-        sal y pimienta negra

SALSA
- 200 cc de jugo de naranjas
-   50 g de manteca
-     5 g de jengibre en rodajas delgadas
-     1 cucharada de hojas de saliva fresca picadas
-       sal y pimienta
-       pimiento de ezpelleta para decorar (opcional)
-       parmesano recién rallado para espolvorear (opcional)

Volcamos la harina en un bol, hacemos un hueco en su centro, echamos dentro los huevos y los mezclamos mientras les vamos incorporando la harina. Con un cornete y luego con las manos formamos un bollo, lo volcamos sobre la superficie de trabajo y amasamos hasta obtener una masa sedosa y firme. Envolvemos y dejamos reposar al menos 30’.

Mezclamos los ingredientes del relleno, salpimentamos y revisamos sabor.

Llevamos a hervor la naranja con las rodajas de jengibre. Apagamos el fuego, cubrimos, dejamos infusionar por 15 minutos y adicionamos la manteca en trozos y las hojas de salvia picadas. Retiramos las rodajas de jengibre, salpimentamos y reservamos a fuego corona.

Estiramos la masa hasta el punto 6 de la máquina y la dividimos en 2 tiras algo más grandes que el molde raviolero.

Colocamos una tira sobre el molde espolvoreado con harina y con una cucharita vamos poniendo el relleno. Cubrimos con otra tira, presionamos suavemente para quitar el aire y hacemos rodar un palo por encima de modo de marcar y sellar.

Volcamos sobre una superficie enharinada y con un cortapastas completamos el cortado. Repetimos con las otras tiras recuperando los restos de masa la reutilizamos. Reservamos sobre superficie enharinada y cubiertos con un repasador.

Ponemos a calentar abundante agua con sal y en cuanto rompió a hervir volcamos dentro la pasta. Retiramos al dente, 2 ó 3 minutos, escurrimos y mezclamos con la salsa.

Emplatamos, espolvoreando con pimiento de ezpeleta. Podemos también decorar con la parte verde del verdeo, picada. 

Un plato super rico, no se lo pierdan!