Si les gusta el pan tipo lactal prueben seguir esta receta, no es difícil y el pan sale muy liviano y muy sabroso, buenísimo tanto con dulce de leche como con jamón serrano...Para 4 ó 5 panes de molde de 28x10 cms, según altura deseada:
- 1 kg de harina común (000)
- 600 ml de agua
- 100 g de leche en polvo
- 40 g de levadura fresca
- 100 g de azúcar (es lo tradicional, pueden ponerle menos)
- 100 g de manteca pomada
- 1 cucharada de extracto de malta o miel
- 1 cucharada colmada de sal (20 a 25 g s/ gusto)
- 1 huevo batido con 2 cucharadas de leche para pintar los panes
Hacemos una corona con la harina mezclada con la leche en polvo y la sal por fuera y en su centro disolvemos la levadura en el agua junto con el extracto de malta o miel y el azúcar. Revolviendo con un tenedor vamos incorporando de a poco la harina al centro y cuando comienza a formarse una masa incorporamos la manteca. Amasamos por unos 10´ hasta obtener una masa suave y sedosa.
Hacemos un bollo, lo colocamos en un bol grande pincelado con aceite, cubrimos con papel film o similar y dejamos leudar por aprox 1 hora, hasta que duplique su volumen.
Una vez leudado lo volcamos sobre la superficie de trabajo apenas enharinada, desgasificamos y dividimos en 4 ó 5 trozos de peso similar; los bollamos, cubrimos y dejamos reposar por unos 20´.
Con la ayuda de un palote estiramos y damos forma rectangular a cada bollo, lo arrollamos por el lado más angosto, sellamos y colocamos en los moldes previamente engrasados (aceite, manteca o rocío vegetal). Presionamos tal que ocupe toda su superficie de modo parejo, cubrimos y dejamos levar hasta que casi duplique su volumen, entre 45´y 60´ según la temperatura ambiente. Encendemos el horno.
Pincelamos con la mezcla de huevo y leche y horneamos a 180* por unos 40´, el pan debe verse bien dorado. Retiramos del horno, volvemos a pintar y luego de unos minutos desmoldamos y dejamos reposar sobre rejilla.
Si deseamos llevarlos al freezer es conveniente envolverlos en papel film aún tibios, se conservan muy bien.
- 1 kg de harina común (000)
- 600 ml de agua
- 100 g de leche en polvo
- 40 g de levadura fresca
- 100 g de azúcar (es lo tradicional, pueden ponerle menos)
- 100 g de manteca pomada
- 1 cucharada de extracto de malta o miel
- 1 cucharada colmada de sal (20 a 25 g s/ gusto)
- 1 huevo batido con 2 cucharadas de leche para pintar los panes
Hacemos una corona con la harina mezclada con la leche en polvo y la sal por fuera y en su centro disolvemos la levadura en el agua junto con el extracto de malta o miel y el azúcar. Revolviendo con un tenedor vamos incorporando de a poco la harina al centro y cuando comienza a formarse una masa incorporamos la manteca. Amasamos por unos 10´ hasta obtener una masa suave y sedosa.
Hacemos un bollo, lo colocamos en un bol grande pincelado con aceite, cubrimos con papel film o similar y dejamos leudar por aprox 1 hora, hasta que duplique su volumen.
Una vez leudado lo volcamos sobre la superficie de trabajo apenas enharinada, desgasificamos y dividimos en 4 ó 5 trozos de peso similar; los bollamos, cubrimos y dejamos reposar por unos 20´.
Con la ayuda de un palote estiramos y damos forma rectangular a cada bollo, lo arrollamos por el lado más angosto, sellamos y colocamos en los moldes previamente engrasados (aceite, manteca o rocío vegetal). Presionamos tal que ocupe toda su superficie de modo parejo, cubrimos y dejamos levar hasta que casi duplique su volumen, entre 45´y 60´ según la temperatura ambiente. Encendemos el horno.
Pincelamos con la mezcla de huevo y leche y horneamos a 180* por unos 40´, el pan debe verse bien dorado. Retiramos del horno, volvemos a pintar y luego de unos minutos desmoldamos y dejamos reposar sobre rejilla.
Si deseamos llevarlos al freezer es conveniente envolverlos en papel film aún tibios, se conservan muy bien.