Las pizzas de "Rúcula y Crudo" son con mucha razón muy apreciadas por estos lares; He aquí una receta con algunas variantes que la hacen aún más apetecible: hierbas frescas y ajo en la masa misma, fontina en lugar de muzzarella + jugo de limón de cobertura: (sobre una receta de El Arte de Amasar del 2.013):
MASA, para 4 pizzas medianas)
- 500 g de harina 0000 (refinada)
- 10 g de levadura fresca
- 300 cc de agua
- 50 cc de aceite de oliva
- 1 cucharadita de tomillo fresco
- 1 cucharadita de orégano fresco
- 1 diente de ajo picado
- 1 cucharadita colmada de sal
- 1/4 cucharadita de pimienta blanca
COBERTURA , para 4 pizzas
- 300 g de fontina rallado (o mitad muzzarella)
- 200 g de jamón crudo en rodajas delgadas
- hojas de rúcula (2 paquetes)
- salsa de tomates frescos (ver abajo)
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 2 cucharadas de jugo de limón
- sal y pimienta negra recién molida
Hacemos una corona con la harina, las hierbas frescas y la sal por fuera y en su centro volcamos el agua y disolvemos la levadura; incorporamos con cuidado la harina y cuando comienza a formarse la masa agregamos el aceite. Amasamos por unos minutos, cubrimos y esperamos unas 3 hs hasta a que duplique su volumen (el tiempo depende siempre de la cantidad de levadura empleada y la temperatura ambiente); la masa debe quedar bastante húmeda.
La salsa de tomates propuesta es simplemente tomate maduro procesado condimentado con sal pimienta, orégano, ají molido y un poco de aceite de oliva. Si no es época de tomates o estamos muy apurados podemos también emplear tomate triturado de buena calidad.
Pasado el tiempo de levado volcamos la masa sobre la superficie de trabajo, desgasificamos, dividimos en 4 partes, bollamos y dejamos reposar en superficie enharinada y cubiertos al menos por 30´ y hasta unas 2 hs (al emplear poca levadura la masa se mantiene relajada y sin levar por bastante tiempo).
Con ayuda de un palote estiramos los bollos bien delgados dándoles forma rectangular y alargada (ello va a facilitar cortar porciones cuadradas relativamente pequeñas y comerlas con la mano); pincelamos con la salsa de tomates y con una pala vamos depositando las pizzas de inmediato sobre la piedra del horno por 3´ a 5´, hasta que su base comience apenas a tomar color.
A la hora de la comida y con la parrilla con las brasas distribuidas de modo bien parejo y bastante más calor que para hacer un asado, grillamos las pizzas con el queso fontina hasta que este haya comenzado a gratinar y la masa se vea tostada.
Mientras, en un bol mezclamos el aceite de oliva con el jugo de limón, sal y pimienta y echamos dentro las hojas de rúcula
A punto de retirar la pizza del fuego distribuimos por encima el jamón y la rúcula. Retiramos, cortamos y servimos de inmediato.
Exquisita al gusto de los que la degustamos!