Un postre refinado, delicioso y refrescante tomado de una clase de cocina francesa con Beatriz Chomnalez (una Maestra!) Para 4 porciones:
- 400 cc de agua
- 100 g de azúcar
- 30 g de té earl grey
- 1 sobre de gelatina sin sabor
SORBETE DE QUESO CREMA
- 300 g de queso crema
- 200 cc de agua
- 100 g de azúcar
- 1 cucharadita de limón
Hacemos un sirope con el agua y el azúcar, retiramos del fuego, echamos el té, dejamos infusionar por 3´, colamos si no usamos saquitos, y agregamos la gelatina previamente disuelta en 1/2 tacita de agua fría. Colocamos en un molde de unos 25x10 cms y llevamos a heladera.
Para el sorbete hacemos un sirope (con más proporción de azúcar que para la gelatina), retiramos del fuego, dejamos entibiar, incorporamos el queso crema, batimos bien y llevamos al freezer.
Cada 20´ retiramos del freezer, batimos y volvemas a llevar al freezer por el transcurso de unas 2 hs hasta que veamos haya ligado bien. Un rato antes de servir lo llevamos del freezer a la heladera.
Emplatamos por ejemplo como en la foto.
Un postre sofisticado y riquísimo, como para sorprender gratamente a alguien muy querido...
- 400 cc de agua
- 100 g de azúcar
- 30 g de té earl grey
- 1 sobre de gelatina sin sabor
SORBETE DE QUESO CREMA
- 300 g de queso crema
- 200 cc de agua
- 100 g de azúcar
- 1 cucharadita de limón
Hacemos un sirope con el agua y el azúcar, retiramos del fuego, echamos el té, dejamos infusionar por 3´, colamos si no usamos saquitos, y agregamos la gelatina previamente disuelta en 1/2 tacita de agua fría. Colocamos en un molde de unos 25x10 cms y llevamos a heladera.
Para el sorbete hacemos un sirope (con más proporción de azúcar que para la gelatina), retiramos del fuego, dejamos entibiar, incorporamos el queso crema, batimos bien y llevamos al freezer.
Cada 20´ retiramos del freezer, batimos y volvemas a llevar al freezer por el transcurso de unas 2 hs hasta que veamos haya ligado bien. Un rato antes de servir lo llevamos del freezer a la heladera.
Emplatamos por ejemplo como en la foto.
Un postre sofisticado y riquísimo, como para sorprender gratamente a alguien muy querido...