La tahini es una pasta de sésamo muy tradicional del Medio Oriente, base necesaria para preparar el hummus (pasta de garbanzos), el babaganoush (paté de berenjenas); diluída con limón y agua se la utiliza para acompañar el falafel (bolitas fritas de garbanzos) y el shawarma (doner kebab en Turquía, finas láminas de distintas carnes compactadas y asadas); untada simplemente en un pan es también exquisita. Y es por su facilidad de elaboración que resulta una excelente idea hacerlo en casa, especialmente en la Argentina actual donde comprarlo resulta bastante oneroso (la semana pasada fui a comprar un frasco para preparar hummus para un evento y su precio fue en realidad lo que me motivó -a prepararlo yo mismo nuevamente). La receta:
- 1 tacita de semillas de sésamo
- 1/3 a 1/2 tacita de aceite neutro
- 1 pizca de sal gruesa
En una sartén sin aceite y a fuego medio tostamos las semillas de sésamo, mezclando, hasta que comiencen a oscurecerse y a despedir su fragancia característica, de 3´a 5´.
Aún tibias las procesamos primero sólo con la sal gruesa y luego con el aceite por unos 5´. Y listo! (Agregaremos aceite hasta conseguir la densidad deseada)
Una exquisita pasta de sésamo que podemos también comer simplemente con la cuchara o untada en una rodaja de pan.
Podemos conservar en recipiente cerrada en heladera por un tiempo prolongado (aunque raramente sucede...)
- 1 tacita de semillas de sésamo
- 1/3 a 1/2 tacita de aceite neutro
- 1 pizca de sal gruesa
En una sartén sin aceite y a fuego medio tostamos las semillas de sésamo, mezclando, hasta que comiencen a oscurecerse y a despedir su fragancia característica, de 3´a 5´.
Aún tibias las procesamos primero sólo con la sal gruesa y luego con el aceite por unos 5´. Y listo! (Agregaremos aceite hasta conseguir la densidad deseada)
Una exquisita pasta de sésamo que podemos también comer simplemente con la cuchara o untada en una rodaja de pan.
Podemos conservar en recipiente cerrada en heladera por un tiempo prolongado (aunque raramente sucede...)