Época de espinacas, están muy tiernas y rebaratas, hay que comerlas...; esta vez combinadas con ricota y unos champignones que tenía en casa resultaron en una sabrosa, liviana y nutritiva tarta. Para una tartera de unos 25 cms de díametro (2 personas):
MASA (la que prefieran, esta es rica y liviana)
- 200 g de harina
- 50 g de manteca o margarina
- 1 pocillo de agua
- sal y pimienta blanca
RELLENO
- 1 paquetes de espinacas de aprox 1/2 kg
- 200 g de ricota
- 150 g de champignones
- 1 cebolla (también puede ser de verdeo)
- 1 cucharada morrón rojo picado
- 3 huevos
- 1 pocillo de vino blanco
- sal, pimienta, ají molido, nuez moscada
- manteca y/o aceite c/n
- queso parmesano o azúcar c/n
Para la masa primero desgranamos con un tenedor la manteca en la harina, agregamos el resto de los ingredientes, amasamos un poco para integrar, envolvemos y llevamos a heladera.
Encendemos el horno. Seleccionamos, lavamos y escurrimos las espinacas y cocinamos en microondas en recipiente cubierto por 1'; volvemos a escurrir y cortamos un poco las hojas.
Salteamaos en aceite y/o manteca las cebollas picadas junto los morrones y luego de unos minutos incorporamos los champignones trozados o fileteados; desglasamos con vino blanco, incorporamos las espinacas y continuamos la cocción hasta que evapore un poco el líquido.
Mezclamos los huevos con la ricota, le añadimos las espinacas y condimentamos a gusto.
Retiramos la masa de la heladera, la estiramos bien delgada con un palote sobre superficie enharinada y forramos la tartera; volcamos por encima el relleno y empleamos tiras de la masa excedente a modo de decoracion. Esparcimos por encima queso rallado o el azúcar y llevamos a horno moderado. (Yo empleé queso pero la próxima emplearé azúcar, ambas alternativas me gustan)
Una vez gratinó el queso o caramelizó el azúcar retiramos del horno, dejamos entibiar un poco, desmoldamos y disfrutamos.
Rica, sana, livianita...