La lasagna siempre tiene su encanto; esta en particular tiene un sabor muy delicado y aún gustoso, es vistosa, tierna, crocante... Para una fuente de aprox 25 x 8 cms:
MASA
RELLENO
- 500 g de ricota
- 100 g de parmesano rallado
- 2 cebollas
- 2 tomates- hojas de albahaca
- crema y/o leche c/n
- sal y pimienta
SALSA BLANCA (sin manteca, también se puede!)
- 2 cucharadas de fécula de maíz
- 1/2 litro de leche
- sal, pimienta,nuez moscada- Queso parmesano, pan rallado y almendras picadas
Realizamos la masa del modo habitual (picar aquí: "Masa para pasta al Huevo").
Para las tapas de lasagna, estiro la masa hasta el último punto de la máquina y la corto en tres láminas del tamaño de la fuente. Hiervo de a una en agua hirviendo por un minuto y paso inmediatamente a un recipiente amplio con agua fría. Reservo.
Mezclo la ricota con el parmesano, sal, pimienta, nuez moscada y agrego crema y/o leche si hace falta para que la mezcla quede húmeda.
Corto las cebollas en rodajas bien delgadas, transparento en aceite de oliva, y agrego los tomates pelados y cubeteados, con todo su jugo. Luego de unos minutos agrego extracto de tomate diluído en vino blanco y dejo espesar.
Para esta salsa blanca sin manteca, disuelvo muy bien en frío la fécula de maíz en la leche y luego caliento a fuego lento mezclando hasta que espese. Sazono con sal, pimienta y nuez moscada y reservo tibio.
Enmanteco bien la fuente, coloco una lámina de masa previamente secada, sobre esta la mitad de la ricota, la albahaca picada y la salsa ,en este orden. Cubro con otra lámina y repito la operación. Sobre la tercer lámina distribuyo bien la salsa blanca y por encima el queso parmesano, el pan rallado y las almendras picadas.
Horneo por 15' en horno medio, hasta que haya gratinado. Mi querida amiga Ro, que ofició de degustadora, dijo que estaba deliciosa, supongo que habrá sido sincera...